Me rodean mariposas. Me sorprendo. Soy una de ellas, en tonos coral, del otro lado de la ventana. Ellas y yo libres, cada quien a su manera. Un pajarito que no veo sacude con su colorido vuelo una planta florida que me gustaría saber nombrar. El esplendor del sol pinta de colores neón todo lo que me rodea. Así, inmersa en la alegría, es tan sencillo ser feliz.
¡Qué bueno! un beso
Gracias! Que tengas un lindo día!
Te has vuelto re poética Vero… muy bien !!!
Abrazos.
Jaja, gracias! Un beso!
Tenés razón! Fui poética (literalmente) muchos años, dejé de serlo y volví a serlo;) besos!
esa es la actitud!
Me ha gustado mucho, incluso me ha animado enhorabuena
Me alegro! Para eso está el paraguas violeta